PARROQUIA DE COLALAO DEL VALLE

PARROQUIA DE COLALAO DEL VALLE
Casa y Templo parroquial Ntra. Sra. del Rosario

sábado, 12 de febrero de 2011

GUION DEL DOMINGO VI° DURANTE EL AÑO, CICLO A

DOMINGO SEXTO DEL TIEMPO DURANTE EL AÑO-CICLO LITÚRGICO A

AMBIENTACIÓN (opcional): En este sexto domingo del tiempo durante el año que estamos viviendo, esta celebración nos invita a reflexionar sobre la espiritualidad de la nueva y verdadera ley que Dios nos ha dado en Jesús. Con alegría vamos a iniciar esta celebración, nos ponemos de pie y cantamos.

ENTRADA: Jesucristo el Hijo de Dios es el signo vivo de la nueva ley: la ley del amor.

LITURGIA DE LA PALABRA: “Felices los que van por un camino intachable, los que siguen la ley del Señor” . La Palabra del Señor que vamos a escuchar, nos indica el camino hacia la verdadera libertad.

EVANGELIO: Jesús nos ha dado una Ley nueva, para nuestro camino hacia la patria del cielo, donde se realizarán plenamente las promesas y bienaventuranzas de esta Ley. Pero como nos sabe débiles, ahora nos alimenta con el Pan de Vida.

ORACIÓN UNIVERSAL: A cada intención nos unimos orando: “Dios del amor, escúchanos”

Por la Iglesia y el Papa Benedicto; para que, por su palabra y enseñanzas, reconozcamos a Jesús que nos llama a la salvación. Oremos…

Por nuestro obispo y sacerdotes; para que cuiden con paciencia y fidelidad el pueblo que les has confiado. Oremos.…


Por la paz en el mundo; para que se acaben las guerras y los hombres vivamos en el diálogo, el respeto y la justicia. Oremos…


Por todos los aquí reunidos; para que, viviendo tus enseñanzas, demos testimonio de tu amor. Oremos…

PRESENTACIÓN DE LOS DONES: Al preparar la mesa de la eucaristía, presentemos con el pan y el vino, nuestro compromiso de cuidar los unos de los otros.

COMUNIÓN: Somos invitados a recibir el Pan de Vida, que al recibirlo nos unamos a Jesús de tal forma que seamos transformados en lo que recibimos.

DESPEDIDA: Sabiendo que el Señor es nuestra fortaleza volvemos a nuestras actividades cotidianas llevando su paz, alegría y consuelo a todos.

COMENTARIO AL EVANGELIO DEL DOMINGO (6° TO "A")

¿CUMPLO Y MIENTO O CUMPLIMIENTO?
(Mt 5, 17-35)
Jesús está con sus discípulos haciendo un largo discurso donde les enseña muchos mandamientos y preceptos para que puedan ser felices. Hoy escuchamos algunos pequeños versículos de toda esta sección.

Lo primero que el Señor hace es una comparación con los maestros de la ley y fariseos enseñando que no hay que hacer como ellos que hablan mucho de las cosas de Dios pero no las cumplen en la vida. Lo importante es llevarlas a la vida de todos los días. Lo más importante en esta parte del discurso es la obediencia a la Ley de Dios.
Muchos se preguntan porqué hay que ser obedientes a los caprichos de Dios. En los medios de comunicación se malinterpreta esto y pueden hacernos dudar de la validez de los mandamientos. Recordemos que en primer lugar los mandamientos fueron dados por Dios como un “código” para encontrar la felicidad. Sólo si somos obedientes a Dios podremos alcanzar la felicidad plena.
Inmediatamente el Señor nos pone ejemplos concretos de obediencia a la ley y como algunos pretenden “hacer trampas” a lo que Dios nos pide.
El segundo tema tiene que ver con el enojo y la maldición de los demás. Por más mala que pueda llegar a ser una persona nunca se la debe maldecir. Tampoco se debe matar ni físicamente, ni con la indiferencia a nadie. La violencia y la agresión nunca puede ser el camino de un discipulo de Jesús. Es un fuerte llamado para revisar nuestras conductas tanto externas como nuestra vida interna.
En tercer lugar Jesús habla del matrimonio. Pero lo que dice se puede aplicar a cualquier tema que tenga que ver con el mal uso de la sexualidad. Es importante entender que hay que crecer en el amor auténtico que siempre respete a las personas y que sea fiel al compromiso asumido en la vida del Sacramento del Matrimonio. Y de la misma manera entender que Dios quiere nuestra felicidad, y  que la alcanzaremos en la medida que vivamos tal como Dios ha querido que viviéramos en la relación con las demás personas, entre las que está situada nuestra sexualidad.
Por último, se enseña a no usar en nombre de Dios en vano y a no usar su nombre para los juramentos. Tampoco se debe jurar por nada ni por nadie. Hay que ser hombres y mujeres de palabra. Cuando algo sea sí, decir sí... cuando sea no, decir con claridad que no.

Este tema es muy importante para aprender nuestra actitud frente al lenguaje y a la comunicación. No hablar demás ni hablar cosas que no sean ciertas. Jesús nos invita a ser veraces, es decir, a hablar siempre con la verdad.

El que busque seguir estas normas será plenamente feliz si logra vivirlas y cumplirlas en su vida. De otra forma, nos está diciendo Jesús que no alcanzaremos la felicidad que todos buscamos.

PARA EL CURA CELEBRANTE

Aportes para la Celebración – Ciclo A
Domingo 6º durante el año

Saludo inicial: ¡Felices los que van por un camino intachable, los que siguen la ley del Señor!, así se expresa el salmo.

Hermanos, Jesús confía en nosotros y nos propone seguir avanzando, esmerarnos en el cumplimiento del programa previsto para el Reino.

El Dios de la felicidad que, por Jesucristo, nos llama a cumplir fielmente lo que le agrada, esté con todos ustedes.

Acto penitencial: Dios nos hizo libres para elegir la vida o la muerte moral. Muchas veces nos equivocamos. Pidamos

humildemente perdón. (Después de un breve silencio)

– Tú sólo eres santo./ Señor, ten piedad.

– Tú nos asistes continuamente con tu gracia./ Cristo, ten piedad.

– Tú vendrás un día a juzgar nuestras obras./ Señor, ten piedad.

Credo: Confesemos, hermanos, la única fe de la Iglesia de todos los tiempos. Creo...

Oración de los fieles: Pidamos al Señor, para nosotros y para todos hombres, que sepamos cumplir sus preceptos con fidelidad y alegría.

A cada intención, pedimos: “Danos la alegría de cumplir tu ley”

Prefacio (Durante el año VII): Cristo nos exhorta a ser luz del mundo por la caridad. Por eso, junto al celebrante, elevemos nuestra acción de gracias al Padre, porque Jesús nunca permaneció indiferente ante el sufrimiento humano.

Padrenuestro: El nombre de Dios es santificado cada vez que nos esforzamos por cumplir sus preceptos. Digamos con fe: Padre nuestro..

Cordero de Dios: Éste es el Cordero de Dios que quita el pecado del mundo. Jesús, que nos llama a agradar a Dios de todo corazón. Dichosos los llamados a la casa del Señor.

(Avisos parroquiales, después de la Oración poscomunión).

Rito de conclusión: La Misa ha terminado. Nuestra misión comienza. Hermanos: Sigamos avanzando en nuestra fidelidad al Evangelio. Jesús nos llama a superar la mediocridad, a no conformarnos con cumplir por cumplir.

El Señor esté con ustedes.

Concédenos, Señor, la gracia de tener un corazón recto y sincero, para cumplir con generosidad y alegría tus mandamientos.

Y que la bendición de Dios...